El consumo de
bebidas vegetales o llamadas también leches vegetales, debido a que
precisamente buscan ser una opción para sustituir a la leche de vaca, ha tenido
un aumento significativamente en los últimos años.
Hace unos 3-4
años en un supermercado normal no encontrabas ninguna de estas bebidas, sólo
estaba disponible la leche de vaca, y solo en algunos casos encontrabas la bebida
de soya pero su compra era más en tiendas naturistas o especializadas y sobre
todo que del resto de bebidas vegetales no habíamos oído hablar.
Ya sea por moda o
por ser intolerantes a la lactosa o por que han decidido llevar una régimen de
alimentación veggi, hoy en cualquier supermercado normal encontramos una amplia
gama de bebidas vegetales, que incluso han desplazado de las preferencias a la
leche de soya, en la actualidad podemos encontrar leche de avena, de arroz, almendra,
coco y esto provoco que ahora en las tiendas naturistas o especializadas
encontremos las variedades de amaranto, girasol, quínoa, alpiste y de avellana.
Ahora que tenemos
esta gran variedad de leches o bebidas vegetales, debido al auge de estos
productos, nos enfrentamos a dos problemas, el alto costo de estas y a la
cantidad de conservadores y mejoradores que se les han añadido, para muchos
este último punto era el que los llevo a hacer a un lado las leches animales.
Pero no todo está
perdido, porque nosotros mismos podemos preparar nuestras leches vegetales y
una da de las bebidas vegetales con mayor aporte nutricional para nuestra
alimentación es la leche de semilla de girasol, ya que es rica en vitamina E,
así como en minerales sobresaliendo el aporte que obtenemos en calcio, potasio,
magnesio y fósforo, aunado también a que nos aporta proteínas y grasas
saludables.
Su contenido en
ácidos grasos la convierte en una bebida natural a la hora de reducir las
enfermedades cardiovasculares, mientras que su alto contenido en magnesio y
fósforo favorecen a un óptimo funcionamiento cerebral y lo mejor de todo es que
una porción de 100 ml de leche de girasol solo nos aporta 38 calorías, siendo
un aliada para las personas que están en un régimen de pérdida de peso.
Aquí te dejamos
una forma de cómo puedes preparar tu leche de semilla de girasol.
INGREDIENTES
· ½ taza de semillas de girasol naturales sin cascara
· 3 tazas de agua natural
PROCEDIMIENTO
- Se ponen a remojar desde una noche antes la ½ taza de semillas de
girasol con las 3 tazas de agua
- Al día siguiente, drenamos el agua donde estuvieron remojadas las
semillas y enjuagamos en el chorro nuestras semillas remojadas
- Colocamos en el vaso de la licuadora nuestras semillas y agregamos 3
tazas de agua natural y procesamos por 2 minutos
- Colamos nuestra preparación preferentemente en una manta de cielo o en
su defecto en un colador
Listo, ya tenemos
nuestra leche de semillas de girasol, también le puedes agregar ya sea una
pizca de canela, un poco de miel de abeja o de agave e incluso un plátano o una
manzana y ya tenemos un súper licuado para iniciar nuestras mañanas con mucha
energía.
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